Internado en la Clínica La Fraternidad de Madrid, el novillero Sergio Flores pernoctó bajo estricta observación médica por una cornada en el cuello de 15 centímetros.
Además sufrió otras en los muslos y la región testicular, dramático balance de la actuación del alumno de Tauromagia Mexicana en su reaparición en la plaza de Las Ventas de Madrid. Hasta cinco heridas sufrió el tlaxcalteca.
“Dentro de la gravedad, está estable”, comentó Antonio Pedrosa, apoderado de Flores en España. “La cornada de 15 centímetros en el cuello no afectó la tráquea ni la yugular o alguna vena importante. Es de esos percances en los que dos milímetros más a la derecha y la vida de Sergio habría estado en peligro. Hemos tenido mucha suerte, pudo ser algo mucho más grave”, describió el apoderado.
En su regreso al coso venteño, Sergio desplegó sólidos argumentos taurinos y dio una vuelta al ruedo tras despachar al primer ejemplar de Javier Molina. El segundo, manso y con la cabeza suelta, se lo echó a los lomos en los primeros pases con la muleta.
“Pasamos un susto tan grande que no recuerdo por cuál pitón lo estaba toreando. El novillo se le vino encima, se le fue a la pierna y en el suelo lo cornó en el cuello.
“Todo pasó muy rápido, el novillo tiraba cabezasos y cornadas, no fue posible saber después de eso, en qué momento fueron las cornadas en los muslos y en el pene”, relató Pedrosa desde España.
Flores alternó con Adolfo Ramos, cuyo balance fue de silencio tras aviso y palmas con un recado. Lo silenciaron luego de dar muerte al novillo que hirió a Sergio. Luis Gerpe dio vuelta al ruedo y escuchó palmas. Los novillos de Javier Molina no dieron juego.
Well that is really dreadful. That is the dangerous game. Many Spanish dies of being a part of this game.
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